Chamberí es un barrio muy moderno, pero de fuerte presencia en la Villa. No sabemos cómo ha sabido refrendar su madrileñismo hasta superar a los viejos barrios populares de Lavapiés o del Barquillo.
Quizá en ello, y en su fuerte afán de asociacionismo, haya influido la dureza de sus años iniciales y todo el esfuerzo que los pioneros del barrio tuvieron que realizar hasta verse atendidos por el Ayuntamiento y dotadas de servicios sus calles. Unas cuantas noticias, sacadas de la prensa de la época nos ilustran sobre aquellos tiempos en lo que habría de ser el populoso barrio de Chamberí.
El día 19 de octubre de 1848, los vecinos de Chamberí declaran en la prensa que deben el nacimiento del barrio a la casa que allí levantó la cantante Benita Moreno en el siglo XVIII, que fue una finca o quinta, a la que dio nombre de Chamberí, en recuerdo de otras posesión parecida, tenida en París, y que le había regalado un saboyano. No hemos investigado en el tema y no podemos decir por tanto, su verdad o falsedad, pero desde luego parece más creíble que el repetido de que a una reina aquellos lugares le recordaban a la ciudad alpina de Chamberí, con la que los campos chamberileros tienen tan escasa semejanza. Dejemos el asunto a nuestro amigo Jaime Castillo, que viene dedicando ya varios años de esfuerzos para aclarar sobre bases documentales la historia del Chamberí madrileño.
Pero hay más. Poco tiempo antes, el 22 de febrero del mismo año, otros vecinos chamberileros, o quizás los mismos, habían declarado a la prensa que querían para su barrio el título de Campo de la Verdad y que rechazaban el nombre de Champvery (sic) o Chamberí. Por entonces, y siempre según sus vecinos, esta barriada en los extramuros todavía de Madrid, contaba ya con cerca de 500 vecinos, que pretendían que fuera declarada y tenida como un verdadero pueblo independiente y con sus órganos propios, o que se le declarase incorporada a Madrid.
Un gran paso corrió el barrio en un solo año ya que el 24 de julio del año siguiente leemos que en tal fecha se abrió al público en Chamberí una iglesia provisional, que tendría vida en tanto se acabara la que ya se había comenzado a construir. A las seis de la mañana del indicado día se hizo la bendición del nuevo templo provisional y se llevó en procesión al Santísimo Sacramento.
Texto incluido en nuestro libro ‘Sucedió en Madrid: Hechos curiosos y raros de la historia de Madrid’
Hay una tercera versión del nombre según la cual, en la guerra con los franceses se asentó en la Plaza de Chamberí, un regimiento que venía de la ciudad francesa.